Puedes ser muy diversos. Estos son algunos ejemplos de motivos de consulta con los que trabajo habitualmente:
Ansiedad: es un estado de activación excesiva que cuesta calmar. En ocasiones tu mente va demasiado deprisa y no puedes pararla, puede que sientas incluso dolores de cabeza, una “niebla mental” debido a tanta activación. A veces cuesta respirar.
Angustia: es un estado de preocupación constante. Te resulta difícil no estar preocupado/a por algo, lo cual te resta capacidad para disfrutar de las cosas que te gustan. Puede que sientas una opresión en el estómago frecuente, como si alguien te apretara.
Estrés: En ocasiones el trabajo, o simplemente nuestra vida cotidiana nos tienen en un nivel tan alto de exigencia que llega un momento que aparecen síntomas muy desagradables: falta de sueño, de apetito, de deseo sexual, imposibilidad de disfrutar…
Situaciones Traumáticas: A veces la vida nos coloca ante situaciones traumáticas. Pueden ser puntuales como un accidente, una agresión de un desconocido/a, o pueden ser prolongadas en el tiempo, como el maltrato recibido por parte de un ser querido (tus padres, tu pareja, un familiar). En ambas ocasiones puede que tu organismo desarrolle síntomas desagradables: estados de alerta constantes, recuerdos que te asaltan, dolores físicos, emociones que no puedes controlar…. No lo dudes, cuídate y pide ayuda.
Decisiones difíciles: es inevitable que la vida en ocasiones nos ponga ante decisiones muy difíciles: ¿cambio de trabajo?, ¿dejo a mí pareja?… En ocasiones nos encontramos paralizamos ante estas decisiones y una ayuda profesional puede ser clave para tomar una buena decisión.
Depresión: se caracteriza por un estado de tristeza continuo e intenso que te impide seguir una vida normal. Puede que sientas bajo este estado que no tiene solución y nadie podrá ayudarte, que no merece la pena hacer nada al respecto. Créeme, no es así.
Crecimiento personal: no hace falta que te encuentres mal para querer crecer como persona y ensanchar tu vitalidad. Trabajo con personas que, pese a no tener síntomas importantes de malestar en su vida, dedican un tiempo a explorarse y sentirse mejor. El resultado te sorprenderá.
Crecimiento y autocuidado profesional: hace muchos años cree una empresa de servicios psicológicos y sociales. Creció hasta contar con 35 trabajadores/as. Durante muchos años he sido responsable de la gestión de estos equipos y ha sido un trabajo fantástico, que dejé para dedicarme a la consulta. Conozco bien el mundo de la empresa y del trabajo público y ayudo a personas que tienen dificultades en estos entornos laborales, o que simplemente quieren utilizar su mejor herramienta para progresar en ese entorno: ellos/as mismos/as.